miércoles, 24 de agosto de 2011
El robo de la Gioconda y las falsificaciones en el arte
El pasado 21 de agosto se cumplieron 100 años del robo de la Mona Lisa en el Museo del Louvre. Muchas fueron las hipótesis, y la lista de sospechosos incluyó al poeta francés Guillaume Apollinaire y el pintor español Pablo Picasso, potenciales interesados en destruir la obra, críticos como eran entonces con los museos y el arte oficial. La Gioconda apareció en Florencia años mas tarde y en manos del carpintero italiano Peruggia. Pero el autor intelectual del robo habría sido el argentino Eduardo de Valfierno, quien encargó el robo para falsificar la obra y vender las copias. Mientras el cuadro estuvo desaparecido Valfierno contactó a seis millonarios quienes compraron falsas Giocondas convencidos de obtener la original.
Las falsificaciones son tan antiguas como el arte, en la antigua Roma circulaban cuencos de plata "egipcios" fabricados por fenicios dispuestos a explotar una moda. Y Miguel Angel, para sobrevivir en su juventud, realizó una escultura de Eros, la envejeció y la enterró para que fuera descubierta, pasando por ser una auténtica pieza arqueológica. Existen falsificadores que se han hecho tan famosos como los grandes maestros: Han Van Meegeren engañó a muchos expertos con sus falsos Vermeer, hasta que fue llevado a juicio.
Dicen que un artista sólo pasa a la gran historia del arte cuando su obra ha sido falsificada, será?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Interesante tu reflexión. Importante tiene que ser el artista para que lo falsifiquen, así que el falsificador conoce el reconocimiento (social y económico) de la obra (y, además, saca provecho). Y supongo que una falsificación para que sea buena tiene que estar hecha también por un artista.
ResponderEliminarBesos,
Chari
Desde luego!!!! Si te copian vas por buen camino (casi siempre...)
ResponderEliminarUn beso
MJ
Que interesante! Es una obra digna de falsificación. Verla es impresionante.
ResponderEliminarMira vos! No lo sabia. Muy buena info.
ResponderEliminarPara copias bien hechas... sé de un artesano que se dedica a pulir y tallar piedras haciéndolas pasar por puntas de flecha indígenas y venderlas como piezas arquelógicas. Como Valfierno, cada uno aplica su arte e ingenio como mejor puede! :)
ResponderEliminarNo se si una falsificación hace mejor a un artista pero conseguir una perfecta falsificación capaz de engañar a los más expertos me parece obra de todo un artista aunque no sea de lo más leal.
ResponderEliminarQue genial!! jajaja siempre hay un argentino en el medio ajajaa ¿es verdad que en el Louvre está expuesta una réplica y no la original? besos!!!
ResponderEliminaryo no sé si se pasa a la historia...pero que se habla se habla...ja
ResponderEliminarpor otro lado, siempre tendemos a copiar algo bueno, exquisito, diferente no?, como inspiración!.
Ahora la falsificación pura y dura, me parece un robo mayúsculo!! pero conseguir una falsificación buena a prueba de experto, hasta te hace mejor artista..seguro!
Gracias por pasarte por mi blog :D
Conocía la historia... muy interesante!
ResponderEliminarWow, no conocía todos estos datos, yo creo que ser falsificado si le da al artista algo de estatus...pero lo peor es la gente que cae con las falsificaciones.
ResponderEliminarjajaja que raro un argentino haciendo de las suyas!!!
ResponderEliminarobvio allá te cuentan otra historia, el backstage posta posta del arte solo lo tenés vos!!!
besote
vani
Gracias por visitar my blog!!!
ResponderEliminarbueno, en realidad no fue Miguel Ángel quien envejeció el Cupido, sino quien se lo encargó. de hecho, el artista fue quien descubrió el engaño (justo justo estoy leyendo una biografía suya ;o). pero, en fin, sí: las falsificaciones son tan antiguas como el arte.
ResponderEliminarahora, también hay que ser un artista para hacerlas. no sé si son una garantía de paso a la gran historia, pero los falsificadores a veces también merecen pasar a ella.
tus historias y reflexiones siempre tan interesantes, Maru.
Es tan interesante la historia...todas las semanas leo en tu blog lindos posts, gracias, Julia
ResponderEliminarMira vos! Todo lo que aprendi hoy! No tenia idea!
ResponderEliminarTema ampliisimo el del arte y el artista, y el falsificador! Hay un libro de Ken Follet, muy viejo, El escandalo Modigliani se llama que trata el tema y te deja pensando...Besos!!
Muy interesante
ResponderEliminarBss
Cecilia
Las copias siempre han existido y siempre existirán!
ResponderEliminarY qué me decís de los clones del mundo de la moda??los podemos ver a diario.
Bss,Carmen
Y sí, porque adquiere notoriedad y valen mucho.
ResponderEliminarCuando comence a leer sentí vergüenza porque un compatriota había hecho ese robo pero cuando leí más abajo lo de Miguel Angel me tranquilicé un poco
Besooss
Hooola Maru! Siempre un placer pasarme a ver qué cosa nueva nos cuentas... yo no me sabía esta historia tan completita, qué interesante!!!!
ResponderEliminarHola Maru!
ResponderEliminarUn post realmente interesante como siempre, desconocia la historia y la verdad es que seria perfecta para unas cuantas novelas!!
Saludos y feliz finde!!
El Jardin de los Muffins
Muy interesante, no conocía lo del robo de la Gioconda o por lo menos no lo recordaba. Yo conozco varias historias en el mundo de la arqueología actual y la verdad que al final suelen ser descubiertas y se montan grandes escándalos.
ResponderEliminarSaludos!!!
Muy interesante ,me encantan estas historias reales..
ResponderEliminarMi opinión es que ya que copias ,copia lo mejor
Justo justo estoy leyendo el libro que cuenta esa historia escrito por Caparrós, lo recomiendo!
ResponderEliminar